Libro Micro Series (dibujos Juanlu)

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Publicado por Pablo en 21

miércoles, 29 de enero de 2014

"El canal 2" de Radio Iris 7 - Finalista



     Hace pocos días recibí la noticia que la carta de amor que había enviado al programa "El canal 2" de Radio Iris 7 en su XI Concurso había sido seleccionada como finalista. Entre los finalistas escogidos tres serían las galardonadas con las primeras posiciones.
     Recibieron escritos de infinidad de lugares de España, una monumental avalancha de la que estaban la mar de satisfechos. Tuvieron un arduo trabajo de selección, y nada a las puertas de subir al podium. No está mal.

 

 La tormenta



Querida Morgana



      Veinte ojos acabaron postrándose en mis hombros, escaneándome el cuerpo, queriendo descubrir entresijos, cosas inconfesables, o resquicios de mal entendidos que les dieran la sublevación final. No tuvieron respuesta. No hubo quinielas que dieran premio, ni siquiera señales que pudieran llevarles a la verdad que buscaban. Entonces se vistieron de blanco, poniéndose guantes de látex me  examinaron cada centímetro de la piel. Buscaron con lupa entre los pliegues,  hasta encontrar tu nombre tatuado en el pecho, al verlo quedaron sorprendidos. Señalaron al unísono con sus manos el punto exacto en el que había caído preso por el canto de la sirena. A partir de ese momento me estiraron en una camilla para borrarlo. Desconcertado les dije que no iban a conseguir su propósito, hasta el punto de caer excitado por la incertidumbre. No paré de mirarles y decirles que estaban locos, que mi locura era de amor, que sus actos eran burlas, que debían dejarme libre. Movían la cabeza diciendo que me callara, que no sabía lo que decía, que debía cambiar mi ceguera, que estaba enfermo y debía recuperarme. Sus palabras fueron dagas, que se clavaron como puñales, haciéndome sentir como barco a la deriva, como dibujo inacabado, como suela de zapato desgastada, como alma incauta y desorientada llena de dudas, a falta del verdadero amor. El cielo gris y plomizo se entremezcló entre nosotros, y la lluvia densa acabó empapando mis vestiduras. Caí en el abismo, sin paracaídas, temiendo por mi vida, desamparada. Hasta que inspiré queriéndo recuperarme del trago, la musa brotó en mi mente, recordándome que era un ángel con capacidad de volar muy alto. Me dio vida, volví a renacer entre los escombros, subí a los altos picos, aparté la marea negra y el bravo oleaje. Desde mi corazón tres rayos de luz se expandieron hacia  todos los puntos cardinales deshaciendo la bruma, para dejar paso al sol. En mis ojos recopilé tu nombre que se había hecho añicos, lo pegué, cosí los ojales con la luz, acabé recomponiendo las vestiduras, el hermoso traje lumínico que me viste el primer día. Levanté una bandera blanca en el barco que nos llevó a la misma orilla. Deshice las banalidades. Los veinte ojos no supieron donde esconderse. Cabizbajos y sedientos prosiguieron su camino, hasta darme la espalda. La mía fue más ancha, cogí un saco y metí todo lo que pude. Valores no me faltaron. Desvestí mi cuerpo y dejé tras de mí una estela de color, en cada pisada nacía hierba. No podía permitirme mirar atrás. Tras varios pasos grité tu nombre. Volví a ser yo. El pronóstico había mejorado. Las lluvias dejaron de ser el impedimento para que mi barca navegara sobre las aguas tranquilas de los mares. Todo se volvió nítido, traslúcido. Y tú mi sirena, rescatada de la costa, varada por la desorientación, y la contaminación de la necedad, acabaste entre mis manos. Te ofrecí mi corazón, y tú tan galante cantaste para mí. Nunca podré darte la totalidad que me diste, por mucho amor que sienta.  Y de esa ira de los dioses de barro, emergí con prudencia, fuerza y valor. El gusanillo del estómago aún lo conservo, no quiero matarlo con el hambre, por eso comamos el manjar y bebamos de nuestras palabras, el verdadero amor es lo que nos da vida. Lo sabes. Lo sé. Mi amor, la tormenta pasó, al fin. Te quiero.


Tu mar



lunes, 27 de enero de 2014

Revista Guka - Mención de recomendación -

Una grata noticia que acabó sorprendiéndome. El texto que envié se titula "La actuación".  Este es el veredicto del jurado:




21-Margarita de Martino ** Naturaleza”
22-Diego Alberto Perez **Necesidades básicas Insatisfechas”
23- ARTURO SANCHEZ BARROS SIGNIFICANTE Jazz de otoño
24- María Consuelo Vazquez “Ilación”
25- Raquel Fernandez “Cáncer”
26- CARMEN PALUMBO “gestos ocultos” “parque desértico”
27-ELIZABETH VIOLA “Aura fugitiva” “puntos de vista”
28- Nora Roitman “Descubrimiento”
29- Victoria Sanchez Diaz “Pequeña soledad”
30- Francisco Manuel Marcos Roldán “La actuación”
31-Nélida Borelli “Quimera”
32- Micaela Cavido “Quise”
33- Clarita (Clara dib) “Blanco Negro”
34- Marcelo Perroni “Ella ahora” “A través de una ventana”
35- Alberto Bataglini “El hombre de la sombra”
36-Silvia Álamos “Recurrente” 37-Rodrigo Fernando Flores “Amor”
38- Sol lora “Bailando un cambalache” tango poesía
“Un vestido que me queda grande” tango poesía.
39- Ricardo Lewitán “Hay una niebla amarilla” “la luz”


NARRATIVA

1º PREMIO: Nora Coria, “Identidad”
1º PREMIO LITERATURA FANTÁSTICA: Natalia Lewitan, “Los extraños”
1º MENCIÓN DE HONOR: Marcos R. Ramos, “Bailando por un sueño”
2º PREMIO: Andrea Prodea, “Donde los títeres juegan su
                          última carta”
2º MENCIÓN DE HONOR: Sandra Ávila, “Chicos guapos”
3º PREMIO: Aldo Peñate, “Foto casual un domingo por la
mañana”
 
3º MENCIÓN DE HONOR: Norma Starke, “Tallado en madera”
4º PREMIO: Marcelo Perroni, “A través de una ventana” 
 4º MENCIÓN DE HONOR: Carmen Palumbo, “Parque desértico”
MENCIONES ESPECIALES:
Elizabeth Viola
Silvia Älamos
Ricardo Lewitan
Estefanía Ledesma
Gonzalo Salesky
Marta Díaz
María C. Villalba
María E. Monke
Patricia Dorantes

MENCIONES DE RECOMENDACIÓN:

Franco Peresutti
Eduardo Eluti
José López Santander
Alan Rebottaro
Carmen Montiel
Michelle Bendeck
Yolanda Ferrari
Juan García Ceballos
Mirta Vignapiano
Rosa Mionis
Alberto Bataglini
María C. Alvarez
Victoria S. Diaz
Francisco M.Marcos Roldán
Mónica Ivulich, “Gato ruso”
Clara Dib, “Blanco Negro”

 Consultas aquí

Texto

La actuación


     En un mundo en el que dicen que nada es real, que todos actuamos, que las cosas se hacen por interés, y que al comportarnos así perdemos el horizonte, creí conseguir domar todas esas cualidades. Los años que trabajé en el circo me hicieron un hombre de bien. Domar los leones y tigres me enseñó a saber llevar las cosas de otra manera, a someterlos bajo mis órdenes, a ser un superhombre. Supe modular el miedo y la angustia, la vanidad y el poder. También me especialicé en ser un buen prestidigitador. Me acerqué a la perfección. Hice desaparecer cosas de mí que no me gustaban. Actué frente al público sin nada que esconder bajo las mangas. Los asombré en cada una de las actuaciones. Trabajé duro durante años, convirtiéndome en una persona polifacética. Todos me aclamaban, deseaban mi presencia, necesitaban de mi ayuda. Fui tan indispensable que la televisión busco un hueco e hice un programa para ayudar a los demás. Fue record de audiencia. Llegué a sentirme tan feliz que comencé a decir todo lo que iba a hacer en beneficio de los que me admiraban. Cuando me puse manos a la obra tuve tanto poder que no supe por dónde empezar, y las promesas comenzaron a quedar a medias. Las medias palabras, los medios asuntos, las medias mentiras, las medias conversaciones, la media cara y a medias tintas, fueron parte de mi vida.  El superhombre en el que me convertí me pasó factura, dejaron de creer en mí a pesar de tener poder de convencimiento. Con el tiempo llegué a acostumbrarme a la nueva vida, y enlacé con todo aquello que por interés me iba a acercar de nuevo a los que creyeron en mí, afinando mi actuación aunque perdiera el horizonte. Lo único que realmente me quedó por realizar fue domarme a mí mismo. Los años de prestidigitador y domador me pasaron factura. Porque nunca hice desaparecer nada, ni cambié mi vida, solo me perdí, sin encontrarme a mí mismo.
 


miércoles, 22 de enero de 2014

Concurso literatura fantástica Pilar Alberdi - FINALISTA - con "Criaturas celestiales"

     Hace unos meses salió las bases de este concurso al cual no dudé en presentarme. Y fíjate, después de unos meses sin saber nada me doy por enterado que he quedado entre los diez finalistas. Toda una sorpresa gratificante. Con lo que dudé sobre el texto que había enviado. 

     Se recibieron 127 cuentos y 72 tuits; una gran parte de ellos nos llegaron desde los países iberoamericanos. 
  El jurado estuvo compuesto por los escritores
 Pablo Martínez Burkett, Sandra Bar y Salvador Ortíz Serradilla. 
 
Ha continuación pueden ver la lista de finalistas.
 
 
Los ganadores de los respectivos concursos han sido:
 Cynthia J. Monalvo Martínez en el apartado de cuento y Juan José Fernández Balaguer en el apartado de tuits de tema zombie.

FINALISTAS CONCURSO DE CUENTOS:

1.
 El hambre de Cynthia J. Monalvo Martínez
2.
 El abrigo negro de Francisco Escaño Sanchez
3.
 Depradación de Roger Vilar 
4.
 Mundo perfecto de Yamundu Aguilera 
5.
 Ángeles caines de Federico Rivero Scarini 
6.
 Criaturas celestiales de Francisco Manuel Marcos Roldán
7.
 Los que son de Inés Mitsou Errandonea 
8.
 La ruta Raúl Alejandro López Nevado 
9.
 Cuando el miedo viene a buscarte de Susana Angélica Orden 
10.
 El sepulturero de Mozart de Carlos José Acuña Gómez 
11.
 Lo que el cuervo vino a contarnos de Cruz José Fernández 



OBRA GANADORA: 
El hambre
 de Cynthia J. Monalvo Martínez 



Para saber más sobre este concurso podéis pinchar aquí.


El texto comienza (muestra del primer párrafo):


Criaturas celestiales




     Cae la tarde. El sol quiere relucir en el opaco cristal del que suspenden gotas de agua cristalina, que penden hasta caer al suelo formando un reguero que va hacía la puerta. A escasos centímetros un chico está sentado cabizbajo. Mira un libro carcomido, de amarillentas hojas, descosido y mal oliente, rasgadas por el paso del tiempo se desprenden con facilidad. Las duras manos del chico sostienen con delicadeza el tomo que lee complacido. Intenta agudizar sus ojos en la tinta difusa de letras casi extintas por la humedad y el moho. Y sin asombro las resigue planeando sobre las hojas. Comienza a cavar lentamente sobre los párrafos, palabras desordenadas donde lee “Criaturas celestiales”. Se excita frotándose la cara con la mano que tiene libre y sigue el curso de las letras. Otea una lámina dorada que resplandece bajo la incidencia de los pocos rayos de sol que le llegan. Sonríe complacido mostrando una dentadura desordenada, olfateando con su nariz respingona la página. En sus ojos el vacío le emana sin esfuerzo, hasta que ve el dibujo de un bosque. Sigue el camino que se abre entre la arboleda y ve que desemboca en un río. Se mira las manos y le tiemblan, permanece frío, distante, inmutable. El dibujo le inunda las entrañas hasta hacerle levitar, sintiéndose único, satisfecho, privilegiado de ser quien es. Pero la confusión le sumerge en un mar de dudas, que alimenta al ver el dibujo oscuro, como sus ojos. De negro azabache le brillan con los rayos de sol que aun inciden en la copa de los árboles. Y comienza a balancearse de adelante a atrás levemente...
 
Gracias al jurado por esta elección. Y a seguir...