Una sorpresa hecha realidad. Hace unas semanas recibí una invitación para participar en Paracuentos. La sorpresa fue evidente, pero no dudé en colaborar. Así que me puse manos a la obra y les envié un microrrelato inédito.
Os preguntareis que es Paracuentos. Un grupo de
bloggers que ha montado una radio digital para hacer conocer
sus creaciones, que pueden ser escuchadas en: www.radiodigitalblue.blogspot.com en directo los martes de 19:30 a
20:30 horas (de argentina). Pero si no puedes hacerlo en directo puedes escuchar los programas grabados ( que se suben dos días después ) en, www.paracuentos1.blogspot.com
Así que, después de la sorpresa vino lo que vino, escuchar el programa en diferido.
Junto a mí escrito se leyeron:
- Noche libre - Autor: Renate Mörder
- Diecisiete - Autor: Celina Aste
- Resurgir - Autor: Francisco Manuel Marcos Roldán (en el minuto 11:50)
Resurgir
Enfilado en lo alto del peñasco el hombre mira
impasible el abismo. No es la primera vez que lo pisa, pero hoy tiene un mal
presentimiento. Intenta dar dos pasos al frente entre las afiladas rocas que
emergen suntuosas. Con el primero resopla dejando escapar un silbido agudo, que
corre por las ensenadas como un eco, perdiéndose entre las montañas. El sudor
le resbala por la frente. Sabe que si hace un movimiento en falso caerá al
precipicio y no habrá salvación posible. Suda a mares por cada uno de los
poros, que palpitan en incerteza. Cae la incomodidad de las gotas condensadas
en la frente y resbalan hacia su rostro encogido. Mira al frente, ve nubes bajo
un horizonte azul. Más cerca, junto a las rocas todo es negro. Ese pequeño
matiz le da claridad sobre la realidad, que ve emerger en el borde de los
cortantes filos. Entonces decide no dar otro paso, porque sabe que si lo hace
acabará despedazado de un golpe por los filos dentados rocosos. Nunca advirtió
su destreza funambulista, y ahora que ve parte de su capacidad, la última gota
que le resbala por la nariz le hace pensar en su situación incómoda e intenta
limpiarse, desestabilizándose. Pierde el equilibrio y cae sin remisión
perdiéndose su silueta bajo el ocaso de la oscuridad. En el vacío absoluto abre
los ojos, se siente liviano, perdido, desorientado. Ha perdido la batalla, pero
su voz aun resuena entre las montañas, y la retoma.
Para escuchar el audio del programa haced clic aquí
Para entender el micro Osvaldo me preguntó cuales fueron los disparadores con la realidad que hicieron que escribiera el micro. Señalé:
- La capacidad del ser humano de resurgir frente a adversidades.
- La dureza en la que a veces nos vemos sumergidos.
- La esperanza.
- El valor de superar las situaciones aunque las demos por perdidas.
Y nada, dar las Gracias a José Osvaldo Ferrari y a Marina Ferrari por esta maravillosa oportunidad de disfrutar de su programa y ser partícipe de unos minutos de audio, en el que he escuchado algo escrito por mí, leído en voz de otra persona. ¡Qué raro suena dicho así!.
Para aquellos que se aventuren, pueden participar de las actividades incorporándose al grupo de Facebook:
“Paracuentos”.
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